UNA
TARDE GRIS
Aquella voz interna me
recuerda los muchos momentos que pasé contigo.
Miraba hacia el cielo, en
aquella tarde gris,
tus ojos reflejaban la belleza
que con donaire el día no mostraba,
una tarde gris que era impredecible,
pero tus curvas bien formadas, me hacían olvidar, lo triste que sentía mi
palpitar.
Tu cabello y ese ímpetu de
mujer difícil, hacían de la tarde gris, la razón en despertar éste loco
frenesí.
Paso a paso, vuelvo a mi
recuerdo los lindo momentos de aquella tarde gris.